
Dicen las grandes periodistas de moda, nacionales e internacionales, que Raf Simons se ha inspirado en salones de belleza, en la alta costura, en la cerámica de Picasso o en el modernismo de mediados de siglo para crear la maravillosa colección de Jil Sander s/s 2012.
Yo considero que todo esto es secundario, que el espíritu que habita toda la colección es Fabiola de Mora y Aragón, reina de Bélgica y exreina de los Belgas, pues tal es el título del monarca reinante en el país.
Yo considero que todo esto es secundario, que el espíritu que habita toda la colección es Fabiola de Mora y Aragón, reina de Bélgica y exreina de los Belgas, pues tal es el título del monarca reinante en el país.


Ya era hora de que se le hiciera justicia y se rindiera tributo al legado estilístico de esta excepcional mujer.
Por supuesto ha tenido que ser un súbdito suyo quien lo hiciera, pues Raf Simons junto con los Seis de Amberes, aún sin ellos saberlo, que lo sabrán digo yo, son los dignos continuadores de su herencia.
Me di cuenta en primer lugar por el peinado de las modelos, que obviamente es una revisión actualizada del de Fabiola, con el que por cierto, y según el periódico ABC que en cosas de realeza es evangelio, lleva más de cincuenta años.
Tras una primera mirada y ya diseccionando la colección uno se da cuenta de que la huella de la reina es omnipresente en cada una de las salidas.
Tras una primera mirada y ya diseccionando la colección uno se da cuenta de que la huella de la reina es omnipresente en cada una de las salidas.
Empezando por un recuerdo al pasado de enfermera de Fabiola antes de desposarse con Balduino, en el Hospital Gómez Ulla de Madrid, con el aséptico blanco de las primeras propuestas y continuando con el gusto por los estampados discretos, los colores puros, la sobriedad de formas, los accesorios netos y geométricos, los tocados blandos, la imprescindible pincelada negra y el refinamiento que impregna toda la colección.
Y como no podía ser menos el desfile termina con un merecido homenaje al vestido de boda de la reina creado por Balenciaga, que ya había confeccionado su vestido de puesta de largo, y es que se dice que fue la madre de Fabiola, la marquesa de Casa Riera, quien descubrió al joven Balenciaga en Guetaria, ellos veraneaban en la cercana Zarauz, convirtiéndolo en modista suyo y de sus hijas y apoyándolo en San Sebastián y Madrid, donde lo pone en contacto con la alta sociedad que más tarde le ayudaría a trasladarse a París cuando estalla la Guerra Civil.
Hoy en día el Museo Balenciaga se alza donde antes estuvo el Palacio de Adalmar, casa de verano de los abuelos de Fabiola
Hoy en día el Museo Balenciaga se alza donde antes estuvo el Palacio de Adalmar, casa de verano de los abuelos de Fabiola
Como veis Fabiola de Bélgica ha sido discreta protagonista en algún momento clave de la historia de la Moda,
so...
Blog save Fabiola!