He tenido un mal sueño eterno que al parecer no lo ha sido tanto ya que, aun con cierto retraso (según la tradición tocaba el domingo pasado), he rexukcitado.
Y a ver, hoy es martes, osea que vuelvo a la cibervida, que en nuestros días es la que vale, con mal pie, porque ya se sabe que en martes ni te cases ni te embarques, que no está el horno para cruceros.
Y es que yo, como Heidimarie Jiline Sander, más conocida como Jil Sander, resucitaré una y mil veces y las que haga falta, así que ante posibles futuras ausencias, no derraméis lágrimas por nosotros, que sé que no lo haréis pero el decirlo imprime dramatismo al texto, porque en algún momento volveremos.
Y sí, Jil, tras múltiples avatares que todos los amantes de la moda conocemos, vuelve a sus orígenes y a regentar la marca que fundó y a la que dio nombre y que en uno de esos reveses del destino se le escurrió entre los dedos hasta el sinsentido de perder su propio nombre, Kafka puro.
Tendrá que lidiar duro pues el Sr. Raf le ha dejado el listón muy alto, pero también es verdad que hoy día las alemanas manejan sino el mundo al menos Europa, luego...
El primer recuerdo que tengo de Jil Sander es la publicidad de un perfume suyo, tal vez Pure, pero no estoy seguro, creo recordar que consistía en un retrato suyo, blanco y negro, desvaído, y en un borde inferior impreso el frasco, es un recuerdo muy vívido en cuanto a la emoción pero impreciso en el detalle. Lo veía periódicamente en la revista DUNIA, alguien se acuerda? Se editó por primera vez en 1976, y al poco tiempo fue comprada por un grupo editorial alemán (!) y supuso una auténtica revolución y renovación en el mundo de la prensa femenina española, dejó de publicarse en 1998.
Mi hermana la compraba siempre y a través de ella empezó a fascinarme la moda, me dejó recuerdos deliciosos e indelebles como la publicidad del perfume de Jil Sander o la imagen de un pantalón de mohair a tono con unos mocasines de charol azul turquesa de Comme des Garçons.
Pero Jil a sus casi setenta años no sólo es un recuerdo, ya tiene un puesto ganado en el Olimpo de la moda.
Cito textualmente:
"-Su estilo está basado en una basic fashion de una pureza extrema de líneas y un corte impecable, que dejan expresar la extrema calidad de los materiales y sus texturas, dentro de un minimalismo opulento.
-Ese lujo de los tejidos, aprendido del prêt-à-porter italiano y básico en Sander, es el que confiere la opulencia a unas formas minimalistas, destinadas a crear un guardarropa sobrio y discreto, adaptado a la mujer moderna y urbana. "Mi mayor ambición es regalar simplicidad a la mujer", afirma, en la misma línea depurativa de Chanel, Halston y Armani.
-En sus creaciones mezcla lo masculino y lo femenino, ya que parte de una inspiración masculina para llegar a un estilo que exalta la feminidad contemporánea, basada más en el intelecto que en la voluptuosidad de las formas."
Vistiendo el siglo XX
Inmaculada Urrea
Ed. Internacionales Universitarias
Deseo que tenga suerte en su nueva andadura.
Para acompañar: fotos de algunas de las hermosas campañas publicitarias de la marca desde los años 80.